#345 ¿Fue Jesús un Profeta Escatológico Fracasado?

Dr. craig’s response

El problema con el que te has familiarizado recientemente, Jessie, normalmente se conoce como "el retraso de la parusía" o del regreso de Cristo. La pregunta es: ¿Creía y predijo Jesús que iba regresar triunfante durante la vida terrenal de los discípulos? Si él creía y predijo eso, ¿qué implica eso para la persona de Cristo? ¿Era él sólo otro profeta iluso del fin del mundo, otro pretendiente mesiánico que fracasó?

Ahora bien, espero que puedas ver que estas últimas preguntas nos lanzan de inmediato a un escenario mucho más grande. Cuando preguntamos si Jesús fue simplemente un profeta escatológico fracasado, debemos hacer dichas preguntas como: ¿Cumplió él las profecías del Antiguo Testamento de una manera más allá del control humano? ¿Hizo él milagros y exorcismos como señales de la irrupción del Reino de Dios en su persona? ¿Resucitó él de entre los muertos en vindicación de las afirmaciones supuestamente blasfemas y personales que le llevaron a su condena y ejecución? Yo creo que lo que pensamos acerca de la resurrección de Jesús al final va a determinar lo que pensamos acerca de su persona. Su resurrección es la confirmación de parte de Dios de las afirmaciones personales radicales que hizo Jesús en las cuales él se ponía en el lugar de Dios. La resurrección mostró a las personas de su tiempo y también a nosotros que él no fue simplemente otro profeta escatológico fracasado u otro pretendiente mesiánico, sino el único Hijo de Dios.

Así que no puedes responder tu pregunta tomándola de manera aislada. Tienes que considerar toda la evidencia, no sólo algunos dichos aislados. Encuentro que muchos cristianos que luchan con dudas acerca de este o aquel tema en particular parecen haber perdido la visión del panorama más amplio y se han olvidado de toda la evidencia que tenemos acerca de Jesús y su resurrección. Si una persona piensa que Jesús fue un profeta escatológico fracasado, entonces quiero escuchar de esa persona de cómo él o ella explica la evidencia que hay para la tumba vacía, para las apariciones post-mortem de Jesús y para el origen de la creencia de los discípulos en su resurrección. Aquí vamos a escuchar un práctica o ensayo de las explicaciones débiles comunes. No sé de tu situación, Jessie, pero si no estás familiarizado con la evidencia de la resurrección de Jesús, te insto a que estudie los artículos y debates sobre este tema que están disponibles en este sitio Web. Esto te ayudará a poner tu pregunta en la perspectiva apropiada. Incluso si uno está en una pérdida completa para explicar cómo Jesús pudo haber hecho las predicciones que mencionas, uno puede racionalmente creer que él era quien afirmaba ser sobre la base de la evidencia que hay para su resurrección. Supongo que C.S. Lewis se encontró en esa posición.

Pero ¿Jesús, de hecho, creía y predijo que vendría otra vez durante el curso de la vida de sus discípulos? Echemos un vistazo a las evidencias de una manera más de cerca.

En su llamado Discurso del Monte de los Olivos (Mateo 24, Marcos 13:1-27, Lucas 21), Jesús da muchas señales que deben suceder antes de su regreso, o de la venida del Hijo del Hombre. Estas incluyen cosas como la persecución generalizada y el testimonio mundial de la iglesia, el cumplimiento de la Gran Comisión (Mateo 28:18-20), un tiempo de apostasía religiosa, guerras y conflictos en todo el mundo, y disturbios naturales en el mundo. Pablo también dijo que ciertas cosas deben suceder antes de que el Hijo del Hombre venga, como la venida del “hombre de pecado” [o de “maldad” como lo traduce la NVI] que se predice en II Tesalonicenses 2, la “entrada” en la iglesia del número total de los gentiles y, por último, el arrepentimiento y la salvación de todo Israel (Romanos 11:25-6).

Cuando leas estos pasajes, vas a tener la impresión de que va a ser un tiempo muy largo hasta que Cristo regrese. ¡Hay muchas cosas que tienen que ocurrir primero! Entonces, es por eso que es tan sorprendente cuando Jesús dice en Mateo 24:34 (o Marcos 13:30) que “no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca”. Uno es tomado por sorpresa porque se nos ha llevado a esperar un período muy largo de tiempo antes del regreso de Cristo. Pero aquí Jesús, tomado en un sentido literal, parece estar diciendo que algunas de las personas que eran sus contemporáneos vivirían para ver la venida del Hijo del Hombre en poder.

Por supuesto, eso no sucedió. Es cierto que Jerusalén fue destruida en el año 70 d.C., como Jesús predijo. Pero el Hijo del hombre no regresó. Así que uno se enfrenta con este problema: ¿por qué fue la parusía—la venida de Cristo—retrasada? ¿Por qué no sucedió cuando uno habría pensado que sucedería basado en este dicho de Jesús?

Hay varias maneras de tratar con este problema. Uno de ellos es la visión preterista, la cual sostiene que, de hecho, todas estas cosas sí ocurrieron para el año 70 d.C. Con la destrucción de Jerusalén, el Hijo del Hombre vino y fue puesto en el trono en el cielo. Aunque esto no fue un acontecimiento visible aquí en la Tierra, sí sucedió. ¡Así que desde el punto de vista preterista no hay problema! Todas estas cosas se han cumplido tal como dijo Jesús.

Tan atractiva como esta solución es en ser muy literal (al menos con respecto a Mateo 24:34), sin embargo no encuentro esta visión convincente. Parece estar equivocada al sostener que la venida del Hijo del Hombre era algún tipo de acontecimiento invisible que tuvo lugar en la sala del trono de Dios y no aquí en la Tierra. Ese acontecimiento estaba supuesto a estar vinculado con la resurrección general de los muertos y con el juicio de los justos e injustos. Eso obviamente no tuvo lugar en el año 70 d.C. Así que no me convence la interpretación preterista.

Otra posibilidad es decir que la profecía era condicional y muy abierta a modificaciones. En el Antiguo Testamento hay ejemplos de profecías que involucran una línea de tiempo— por ejemplo la profecía de Jonás a Nínive “¡Dentro de cuarenta días Nínive será destruida!”—pero entonces algo sucede de modo que ya no era apropiado para que se cumpliera la profecía. De hecho, Nínive no fue destruida porque el pueblo se arrepintió y se volvió a Dios, a pesar de que Dios le había dicho a Jonás que le dijera a la gente que en cuarenta días Nínive iba a ser destruida. Así que se ha sugerido que tal vez Jesús sí profetizó que todas estas cosas iban a suceder dentro de una generación, pero algo cambió para que la parusía fuera retrasada.

Mientras que esa es una posibilidad, en este caso no parece haber nada que haya sucedido que causara que la profecía de Jesús fuese modificada. Nínive se arrepintió, por lo que ya no era apropiado juzgar a Nínive. Pero Jerusalén no se arrepintió y nada cambió. Jerusalén, de hecho, fue destruida. Así que ¿Por qué no se cumplió el resto de la profecía? No parece ser una explicación satisfactoria el simplemente decir que la profecía fue modificada.

Así que me siento inclinado a buscar una tercera alternativa, la cual es que la profecía es ambigua. Eso es decir que no se sabe muy bien el contexto original de esas palabras, por lo que no podemos estar seguros de que Jesús, de hecho, estaba prediciendo que iba a regresar durante la vida terrenal de sus contemporáneos. De hecho, el eminente erudito del Jesús histórico, John Meier, no piensa que ese dicho de Jesús ni siquiera sea auténtico, es decir que no piensa que realmente haya sido proferido por el Jesús histórico. Meier insiste en que él de ninguna manera está tratando de evitar la conclusión de que Jesús dio una profecía falsa—Meier es despiadadamente objetivo—más bien, el argumenta que la evidencia demuestra que ese dicho probablemente no es auténtico.

Mi propuesta es más modesta. Recurro al hecho bien conocido de que a menudo no tenemos el contexto original en el cual se dijeron los dichos de Jesús, y mucho menos su redacción precisa. Cuando nos recordamos de que los Evangelios no nos dan una grabación de las palabras de Jesús, de que los evangelios están escritos en griego, mientras que Jesús probablemente habló la mayor parte del tiempo en arameo, de que los escritores de los Evangelios ni siquiera tenían un mecanismo para hacer comillas y así distinguir el discurso directo del indirecto, ya podemos ver que no tenemos una transcripción palabra por palabra de lo que dijo Jesús. Los discursos de Jesús a menudo son parafraseados o resumidos. Los Evangelistas a veces organizan estos dichos de diferentes maneras. Así que no deberíamos pensar que siempre tenemos las palabras de Jesús exactamente como fueron pronunciadas o su contexto original.

Un ejemplo sorprendente de este fenómeno que tiene una relevancia directa con nuestra pregunta se puede ver cuando comparamos a Mateo 10:23 con Marcos 6:7-13. En el pasaje de Marcos, tenemos la descripción de la misión de los Doce. Jesús llama a los doce discípulos y los envía de dos en dos a predicar en las distintas ciudades de Israel. Así que esta es una misión durante la vida de Jesús en la que los discípulos van y regresan y luego continúan su aprendizaje con Jesús. Pero cuando te vas a Mateo 10 y observas su relato del ministerio de los Doce, lo que descubres es que Mateo mezcla el encargo de la misión que dio Jesús a los doce discípulos con ciertas profecías acerca del fin del mundo, acerca de la venida del Hijo del Hombre. Así que te encuentras con un versículo como Mateo 10:23, “Cuando os persigan en una ciudad, huid a otra. De cierto os digo que no acabaréis de recorrer todas las ciudades de Israel antes que venga el Hijo del hombre”. Originalmente esto era probablemente un dicho acerca del fin del mundo, de la venida del Hijo del Hombre. Pero aquí Mateo mezcló eso con el discurso de la misión de los Doce. ¡Sin embargo, Mateo obviamente sabía cuando escribió de que la venida del Hijo del Hombre no sucedió antes de que la misión de los Doce había terminado! Él sabía que ellos iban a pasar por las ciudades de Israel, que regresarían y seguirían su aprendizaje con Jesús. Jesús, luego, iría a la cruz y ya conoces el resto de la historia. Sin embargo, al poner este dicho en este contexto, Mateo lo hace sonar como si Jesús les estuviera diciendo a los doce discípulos, "Antes de que ustedes hayan pasado por todas las ciudades de Israel, la venida del Hijo del Hombre va a ocurrir."

Esta es una perfecta ilustración de mi argumento. Si Mateo 10:23 no significa que el Hijo del Hombre iba a regresar antes de que terminara la misión de los Doce, no hay ninguna razón para pensar que Mateo 24:34 significa que el Hijo del Hombre iba a volver dentro de la primera generación. No podemos estar seguros de cómo este dicho se dio originalmente o de cuál era su contexto.

Ahora bien, vayamos otra vez a Marcos 13. En el versículo 30 Jesús dice: "De cierto os digo que no pasará esta generación sin que todo esto acontezca”. ¿A qué se está refiriendo la frase "todo esto"? Miremos el versículo anterior: “Así también vosotros, cuando veáis que suceden estas cosas, conoced que está cerca, a las puertas” Cuando vean "estas cosas", entonces ustedes saben que el Hijo del Hombre está cerca. Así que "estas cosas" no incluye la venida del Hijo del Hombre en sí. ¿Qué incluye eso? Miremos atrás en el versículo 23: “Pero vosotros ¡tened cuidado! Os lo he dicho todo de antemano”. Jesús está hablando de todas esas señales que van a suceder antes de la venida del Hijo del Hombre, incluyendo la destrucción de Jerusalén. Así que incluso si se toma de manera literal lo que él dice es que dentro de esta generación sucederán todas estas cosas—es decir, esas señales, la persecución, la destrucción de Jerusalén—antes de que venga el Hijo del Hombre. Luego después de eso, sucederá la venida del Hijo del Hombre. Así que pudiera ser que al poner el versículo 30 más adelante en el discurso, después de la descripción de la venida del Hijo del Hombre, Marcos lo hace sonar como si la venida del Hijo Hombre ocurrirá dentro de esa generación, cuando en realidad el dicho se trata de "estas cosas" que deben preceder a la venida del Hijo del Hombre. Así que lo que estoy sugiriendo es que el dicho no podría estar en su contexto original, el cual en un principio este dicho no quería decir que la venida del Hijo del Hombre en sí tomaría lugar dentro de la primera generación.

Para otra ilustración de mi punto, vamos a ver a Marcos 8:38-9:1:

‘Por tanto, el que se avergüence de mí y de mis palabras en esta generación adúltera y pecadora, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga en la gloria de su Padre con los santos ángeles. También les dijo: De cierto os digo que algunos de los que están aquí no gustarán la muerte hasta que hayan visto que el reino de Dios ha venido con poder’.

Lo que Jesús dice es que las personas que estén vivas van a ver que el Reino de Dios ha llegado (en el tiempo verbal perfecto) con poder. Jesús podría haber querido decir que ellos van a ver que el Reino ya ha llegado con poder, refiriéndose al propio ministerio de Jesús de hacedor de milagros y de exorcismos de los seres demoníacos, los cuales él había dicho que eran señales de la irrupción del Reino de Dios. O podría referirse a su muerte y resurrección de entre los muertos. Uno bien se podría imaginar a la gente después de la resurrección de Jesús mirando hacia atrás en su vida y ministerio, y decir: “¡Wao, el Reino de Dios ha venido realmente con poder!" El dicho incluso podría referirse a la transfiguración, la cual Marcos relaciona luego en el capítulo 9. Así que es muy posible que en el contexto histórico original esta palabra de Jesús no tenía la intención de decir que hay personas aquí que verán al Hijo del Hombre regresar con poder y gloria antes de que experimenten la muerte.

Pero ahora miremos a cómo Mateo maneja este versículo en Mateo 16:28. Aquí Mateo, contando este mismo acontecimiento, lo reformula. Recordemos que ellos no tenían comillas. Esto está parafraseado. Aquí está la manera que Mateo lo puso: “Les aseguro que algunos de los aquí presentes no sufrirán la muerte sin antes haber visto al Hijo del hombre llegar en su reino”. ¡Ahora eso sí suena como si ellos iban a ver el regreso del Hijo del Hombre durante su vida! Pero sabemos que Mateo está parafraseando este pasaje en Marcos 9:1, el cual en realidad no dice eso. Mateo lo está transmitiendo de una manera un poco diferente. Una vez más, este caso ilustra mi punto. Estos dichos podrían tener un significado muy diferente en su contexto original. Alguien que sólo conociera a Mateo 16:28 bien podría pensar que Jesús está diciendo: "Aquí hay personas que no van morir hasta que vean mi parusía", pero cuando esa persona lee Marcos 9:1, eso no es tan obvio.

Tenemos que recordar que nosotros, parados a una distancia de veinte siglos, no siempre tenemos un manejo de cómo esos dichos pudieron haber sido utilizados originalmente y qué ellos significaban. Es totalmente consistente pensar que Jesús pensó que esas cosas, como la destrucción de Jerusalén, sucederían dentro de su generación, pero no pensaba que necesariamente su propia venida iba a acontecer dentro de esa primera generación. Recordemos que Jesús dijo que él no sabía la fecha de su regreso (Marcos 13:32). Él no sabía cuando sería la venida del Hijo del Hombre. Así que es bastantemente consistente para él decir que "todas estas cosas" van a suceder y luego el Hijo del Hombre vendrá. ¿Cuánto tiempo después? Él no lo sabía. Él admitió no saberlo.

De hecho, hay un buen número de parábolas que dio Jesús que implican que será un intervalo de tiempo muy largo antes de que el Hijo del Hombre venga.

“¿Quién es, pues, el siervo fiel y prudente, al cual puso su señor sobre su casa para que les dé el alimento a tiempo?Bienaventurado aquel siervo al cual, cuando su señor venga, lo halle haciendo así.De cierto os digo que sobre todos sus bienes lo pondrá.Pero si aquel siervo malo dice en su corazón: “Mi señor tarda en venir”,y comienza a golpear a sus consiervos, y aun a comer y a beber con los borrachos, vendrá el señor de aquel siervo en día que éste no espera, y a la hora que no sabe,y lo castigará duramente y pondrá su parte con los hipócritas; allí será el lloro y el crujir de dientes” (Mateo 24:45-51).

Miremos la versión de Lucas de esta misma parábola en Lucas 12:35-47,

“Tened vuestra cintura ceñida y vuestras lámparas encendidas; sed semejantes a hombres que aguardan a que su señor regrese de las bodas, para que, cuando llegue y llame, le abran en seguida. Bienaventurados aquellos siervos a los cuales su señor, cuando venga, halle velando; de cierto os digo que se ceñirá y hará que se sienten a la mesa y vendrá a servirles. Y aunque venga a la segunda vigilia o a la tercera vigilia, si los halla velando, bienaventurados son aquellos siervos. Pero sabed esto, que si supiera el padre de familia a qué hora el ladrón había de llegar, velaría ciertamente y no lo dejaría entrar en su casa. Vosotros, pues, también, estad preparados, porque a la hora que no penséis el Hijo del hombre vendrá.”

Entonces Pedro le dijo: “Señor, ¿dices esta parábola a nosotros o también a todos?” Dijo el Señor: “¿Quién es el mayordomo fiel y prudente al cual su señor pondrá sobre su casa para que a tiempo les dé su ración? Bienaventurado aquel siervo al cual, cuando su señor venga, lo halle haciendo así. En verdad os digo que lo pondrá sobre todos sus bienes.Pero si aquel siervo dice en su corazón: ‘Mi señor tarda en venir’, y comienza a golpear a los criados y a las criadas, y a comer y a beber y a embriagarse, vendrá el señor de aquel siervo en día que éste no espera y a la hora que no sabe, y lo castigará duramente y lo pondrá con los infieles. Aquel siervo que, conociendo la voluntad de su señor, no se preparó ni hizo conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes”. (Lucas 12:35-47).

Este es un ejemplo de las parábolas que Jesús dijo para preparar a sus seguidores del posible retraso de la venida del señor. Él no podría venir hasta la segunda o tercera vigilia, más tarde de lo que se esperaba. La pregunta de Pedro es interesante: ¿es esta parábola para nosotros? ¿Para nosotros que estamos escuchando en este momento? ¿O es esto para todos? Me imagino que Jesús estaba diciendo que eso no era sólo para los discípulos. En un sentido, esto es una advertencia para todos los creyentes de todos los tiempos de que estén listos/preparados.

Ahora miremos a Mateo 25:1-13. ¡Una parábola no es suficiente!

“Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que, tomando sus lámparas, salieron a recibir al novio. Cinco de ellas eran prudentes y cinco insensatas.Las insensatas, tomando sus lámparas, no tomaron consigo aceite;pero las prudentes tomaron aceite en sus vasijas, juntamente con sus lámparas. Como el novio tardaba, cabecearon todas y se durmieron.Y a la medianoche se oyó un clamor: “¡Aquí viene el novio, salid a recibirlo!”Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron y arreglaron sus lámparas.Y las insensatas dijeron a las prudentes: “Dadnos de vuestro aceite, porque nuestras lámparas se apagan.”Pero las prudentes respondieron diciendo: “Para que no nos falte a nosotras y a vosotras, id más bien a los que venden y comprad para vosotras mismas.”Pero mientras ellas iban a comprar, llegó el novio; y las que estaban preparadas entraron con él a la boda, y se cerró la puerta.Después llegaron también las otras vírgenes, diciendo: “¡Señor, señor, ábrenos!”Pero él, respondiendo, dijo: “De cierto os digo que no os conozco.”Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del hombre ha de venir”.

No sabes cuando Cristo va a regresar. Por lo tanto, si el señor se tarda, aun necesitas estar listo.

¡Aún eso no es suficiente! Otra parábola:

‘El reino de los cielos es como un hombre que, yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes. A uno dio cinco talentos, a otro dos y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y luego se fue lejos.El que recibió cinco talentos fue y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos.Asimismo el que recibió dos, ganó también otros dos. Pero el que recibió uno hizo un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su señor. Después de mucho tiempo regresó el señor de aquellos siervos y arregló cuentas con ellos. Se acercó el que había recibido cinco talentos y trajo otros cinco talentos, diciendo: “Señor, cinco talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros cinco talentos sobre ellos.” Su señor le dijo: “Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré. Entra en el gozo de tu señor.” Se acercó también el que había recibido dos talentos y dijo: “Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros dos talentos sobre ellos.” Su señor le dijo: “Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré. Entra en el gozo de tu señor.” Pero acercándose también el que había recibido un talento, dijo: “Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste y recoges donde no esparciste; por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo.” Respondiendo su señor, le dijo: “Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré y que recojo donde no esparcí. Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros y, al venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses. Quitadle, pues, el talento y dadlo al que tiene diez talentos,porque al que tiene, le será dado y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.Y al siervo inútil echadlo en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes”’. (Mateo 25:14-30).

Otra vez, aquí puedes ver la idea de un intervalo largo de tiempo en juego antes del regreso del Señor.

Por último, una parábola más:

‘Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria,y serán reunidas delante de él todas las naciones; entonces apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. Y pondrá las ovejas a su derecha y los cabritos a su izquierda.Entonces el Rey dirá a los de su derecha: “Venid, benditos de mi Padre, heredad el Reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo,porque tuve hambre y me disteis de comer; tuve sed y me disteis de beber; fui forastero y me recogisteis;estuve desnudo y me vestisteis; enfermo y me visitasteis; en la cárcel y fuisteis a verme.”Entonces los justos le responderán diciendo: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento y te alimentamos, o sediento y te dimos de beber?¿Y cuándo te vimos forastero y te recogimos, o desnudo y te vestimos?¿O cuándo te vimos enfermo o en la cárcel, y fuimos a verte?”Respondiendo el Rey, les dirá: “De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.” Entonces dirá también a los de la izquierda: “Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles,porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber;fui forastero, y no me recogisteis; estuve desnudo, y no me vestisteis; enfermo y en la cárcel, y no me visitasteis.”Entonces también ellos le responderán diciendo: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, sediento, forastero, desnudo, enfermo o en la cárcel, y no te servimos?”Entonces les responderá diciendo: “De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco a mí lo hicisteis.”Irán estos al castigo eterno y los justos a la vida eterna’ (Mateo 25: 31-46).

Observemos que las personas son juzgadas sobre la base de cómo ellas actuaron hacia los demás cristianos en el mundo, de cómo se comportaron con la iglesia de Cristo, lo que sugiere otra vez un periodo largo de tiempo durante el cual las personas que nunca habían conocido a Jesús, que no le habían visto, estuvieron ministrando a las necesidades de su pueblo.

Tomando todo junto con todas las otras parábolas y dichos, pienso que tenemos buena razón para pensar que el mismo Jesús creía que en realidad volvería en la gloria pero no sabía cuando iba eso a suceder. De manera que preparó a sus seguidores para la eventualidad de que eso se podría tardar un largo tiempo. Por lo tanto, Marcos 9:1 y Marcos 13:30 (y sus paralelos) tienen que leerse en este contexto más amplio de la enseñanza de Jesús. La caída de Jerusalén en el 70 d.C. pudo haber sido simplemente un anuncio de una gran tribulación final y la caída de Jerusalén va a suceder otra vez en los últimos tiempos. Aunque Jesús pudiera haber pensado que muchas de “estas cosas” sucederían dentro de su generación, no pienso que tenemos bases sólida para decir que Jesús creía que la venida del Hijo del Hombre iba a ocurrir durante la vida de sus contemporáneos.